El grupo italiano con sede en Parma, Davines S.p.A., dedicado al sector de la cosmética profesional, acaba de anunciar que ha obtenido la certificación B Corporation, por lo que se incorpora a la red global de empresas que han redefinido su propio modelo de business utilizándolo como fuerza de impacto positivo sobre las personas y el planeta.
Fundada en el 1983 por la familia Bollati, la compañía es hoy una realidad internacional dedicada al mercado profesional del haircare, con la marca Davines, y del skincare, con la marca Comfort Zone. Además de su sede en Parma, cuenta con filiales en Londres, París, Nueva York, México DF, Hong Kong y Deventer (Holanda) y su distribución alcanza globalmente más de 90 países. Ambas marcas se especializan en la creación de productos de calidad, elaborados con espíritu artesanal y desarrollados científicamente a través de las tecnologías cosméticas más avanzadas, y han hecho de la sostenibilidad y de la atención al ser humano los valores cardinales de su propia trayectoria.
Desde el año 2000, esta compañía italiana aspira a conciliar el éxito de la actividad empresarial con un impacto que sea lo más positivo posible no sólo sobre el medio ambiente sino también sobre la comunidad de partes interesadas con quienes se relaciona, constituida por empleados, proveedores y clientes. Esta vocación por la sostenibilidad tiene sus raíces en los orígenes de la historia empresarial, ha plasmado su identidad e impregna las vivencias cotidianas a través de un enfoque sistémico. Con los años, esta visión se ha ido declinando en múltiples proyectos que guían al grupo en su concepción de productos y servicios. Desde el 2015 un informe anual llamado “Informe de Sostenibilidad” detalla todas las actividades sostenibles llevadas a cabo durante el año, presenta los resultados obtenidos y anuncia los objetivos que la compañía se propone alcanzar para el año siguiente.
La voluntad de Davines y Comfort Zone de certificarse B Corporation es congruente con su propósito de proseguir con método, objetividad y coherencia todos los esfuerzos para crear un modelo de empresa orientado hacia una “longevidad próspera”, concretizando cada vez más los valores que la compañía expresa. “Nos ha reconfortado descubrir que existe un movimiento de empresas inspiradas por los mismos principios en los que creemos nosotros, nos hace pensar con optimismo que la economía puede convertirse en un instrumento al servicio del bienestar de la sociedad y no lo contrario“.-Paolo Braguzzi, Director General del Grupo Davines S.p.A.
Con esta certificación el Grupo Davines entra a formar parte de un conjunto de compañías, llamadas B Corp, que además de tener como objetivo el beneficio, compiten para maximizar su impacto positivo aportando soluciones innovadoras a las problemáticas medio ambientales y sociales, y respetando al mismo tiempo los niveles más elevados de resultados, transparencia y responsabilidad. Las compañías italianas que desean unirse al movimiento B Corp son evaluadas por el ente certificador B Lab, mandatado para medir el grado de resultados sociales y medio ambientales de la empresa en cinco ámbitos temáticos: gestión, personas, comunidad, medio ambiente y clientes. Alcanzar el puntaje requerido para la certificación, que va desde 80 hasta un máximo de 200, exige profundos cambios estructurales, inclusive para empresas que, como el grupo Davines, ya desde hace años vienen invirtiendo en el desarrollo sostenible.
Con un puntaje de 99 para el grupo entero, incluyendo sus filiales, el año 2016 se cierra obteniendo la certificación gracias a los resultados positivos conseguidos en los siguientes ámbitos:
- • Análisis del ciclo de vida de los productos (SLCA) en base a su impacto medio ambiental y social,
- • Reducción de los materiales relativos al embalaje primario, secundario y terciario con una selección progresiva de aquéllos que tienen menor impacto medio ambiental y un diseño más responsable de los envases,
- • Disminución de los deshechos con el consecuente aumento de la cuota destinada al reciclaje,
- • Implicación de todos los proveedores en la trayectoria de certificación y una atención especial al bienestar de la plantilla empresarial.
Esta meta es en realidad para Davines y Comfort Zone el punto de partida de un recorrido en el que se prevé un ascenso constante con la consciencia de que, aunque se haya hecho ya un buen trecho, todavía queda mucho por recorrer. La certificación llega al alba de una ulterior confirmación importante para el grupo, la superación de los 100 millones de euros de facturación, reiterando la tendencia de crecimiento positivo que acompaña la empresa desde hace más de veinte años.
